Jóvenes en tiempos de elecciones.

Me pregunto si así como tenemos libertad para hablar de temas triviales, porque no para los de vida o muerte? Sería una bonita definición de democracia, en realidad debería ser de este modo. Es hoy cuando necesitamos la más apasionada discusión y es que en estos tiempos es cuando más necesitamos voces disidentes. Por eso, hoy escribo aquí para contribuir con esa discusión, en vísperas de una jornada electoral de la cual espero todos salgamos bien beneficiados. Sobre todo porque quiero que los jóvenes Colombianos comencemos a involucrarnos más de nuestra democracia, jamás podemos quedarnos solos con la historia, con el pasado con lo que hemos vivido y no tener memoria. Quisiera hablar entonces de una palabra que ha sido etimológicamente mal usada, desvirtuada de su significado y es el patriotismo, no significando apoyar el gobierno sino  como dijo Mark Twain, apoyar el País. Los gobiernos son creaciones artificiales, son creados por la gente para alcanzar ciertos objetivos, la igualdad de todos y el derecho a “La vida, La Libertad y la búsqueda de la felicidad”  y cuando alguna forma de gobierno se vuelva en contra de estos fines nosotros como pueblo estamos en el derecho de alterarlo o abolirlo para instituir algo nuevo, eso es doctrina democrática, esa es la idea de la democracia.

Mañana es un día muy importante para la ciudad, para el departamento y obviamente para el mismo país. Así usted no lo crea de esto depende su sueldo, su salud, su trabajo, su vivienda, su alimentación, su educación, su felicidad, la de su familia y la del resto de la ciudad. Siéntese a pensar con patriotismo (recuerde no apoyar al gobierno si no a su país) basta ya de quejarse ¡! (y quejarse es diferente de criticar, porque criticar al gobierno es el más elevado acto de patriotismo), no se haga el cómodo, no se conforme, por Dios!! la política NO ES DE EXPERTOS! Se necesita solo un poco de conocimiento histórico para entender que peligroso es  pensar que la gente que dirige el país sabe lo que hace. No hay expertos chicos. Los invito entonces a votar, a contribuir al país que es lo único real, sustancial y eterno, que debe ser cuidado y observado. Ejerza  su derecho a la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad.